Y si algo hay que me plazca más escribir es de esas cosas que tenemos los seres humanos que nos hacen tan diferentes... Hay muchas parejas que no llegan a conocerse. Otras que se conocen demasiado y se separan de momento…. He estado pensando y pensando qué me ha hecho de la noche a la mañana que pase del cenit a la decadencia… Me digo: no has conocido a alguien, que se te revela en cuerpo y alma, que te dice que olvides, que solo los ojos miran en una dirección… Y sigo repitiendo en mi interior lo que mi memoria recuerda que ha sido: 'no te sientas dolido por ello, pues si estas cansado de esperar no pasa nada, si sigues enamorado no pasa nada, pero si de verdad dices que quieres, que amas, te vas y ya piensas de otra manera, eres como un hombre lobo que, al cambiar de hábitat, sale el que hay dentro de ti, no eres el mismo'. Y qué hay de verdad en esas frases sino la constatación que cada pensamiento infecundo ha sido para meterme más en un pozo.
Por qué ese empeño en intentar falsear la realidad de una historia, que ha sido por amor y no por gozo, que ha aportado dolor, desasosiego, malestar, irritabilidad…, y seguir haciéndolo una y otra vez para preguntarse, una y otra vez:
Por que te has hecho ese daño? Por que has hecho ese daño?
Existe una necesidad del contacto con una mujer (con un hombre en una mujer) y después cada uno por su camino….?
Acaso las mujeres te exprimen y luego si te veo no existes?
Das tanto a esa mujer que pide más y más y ya no puedes dar más?
Soy, al parecer de alguién o de muchos, dulce, agradable, casi subido en un pedestal, un sol, un amanecer, un todo... Pero ay! Hay veces que me veo a la defensiva, me evado dos días, y se acabaron las flores y los corazones. Y realmente es duro para cualquiera no ver, tocar, sentir, oler…
Y hete aquí que como acompañamiento a este pequeño y corto cuento de una vida real, me he dicho que vamos a celebrar este San Francisco con una elaboración tan sutil como diferente... Nada es lo que aparece y todo puede ser cuando hablo de mermeladas y posibilidades de 'maridar' frutas, especias, y licores bien compuestos. Es un homenaje a mi muy querida familia irlandesa, que no sólo está representada por Laura, Paul, Ciara y Pablo, sino por cada uno de los muchos irlandeses y no irlandeses que habitan la ciudad de Derry, en Irlanda del Norte, que se cruzaron en mi corta estancia en esa bella y acogedora ciudad, a pesar de su clima imposible para un almeriense que gusta de la luz y el sol a pesar de los sufridos y posibles 40º. Pues bien... Cada uno sabrá traducir 'Hot Whiskey' (?)... Pero sólo los afortunados habrán saboreado esta bebida en el lugar dónde las hacen y muy bien y en mejor ambiente... Y cierto en noches o días de frío...Es la manera mas fácil de entrar en calor aunque pudiera parecer que también es cara... Pero sólo hay que probarla para convencerse de los beneficios que conlleva servirse una copa. Saludable diría que es la mejor definición... Claro que con moderación... La Salud es primordial y sino que se lo cuenten a los irlandeses que saben disfrutar de su salud como nadie y apostando que cada trago en una larga noche no hace más que incrementar su bien armado cuerpo para soportar el deseado negocio del amor... Por la mujer, la tierra y su libertad... Y viceversa.
Nos hemos propuesto pues desarrollar un elaborado que congenie con esa tradición del irlandés que puede con cualquier adversidad y lo acompaña con una buena bebida y el producto que hizo de esta tierra de almería un santo y seña: la uva... Sólo de pensar que la MERMELADA DE UVA, CLAVO Y WHISKY es una receta que casa con historias tan parecidas en tierras en lo común inhóspitas... Merece la pena haberlo hecho realidad... Un sabor y una textura que bien acompañada con el salmón, el cordero, la carne de pato y el lomo, nos dejaran un paladar fortalecido, frente a sentimientos que bordean la locura si nos dejamos llevar por el ayer y no enfrentamos el hoy.